Ha pasado algo más de un año desde que Bruce realizará sus dos conciertos en Barcelona. Ayer jueves Springsteen volvió a subirse al escenario del Estadi Olimpic para seguir demostrando que, a pesar de los años y de sus problemas recientes con la voz, sigue siendo un auténtico coloso del espectáculo. El concierto empezó con diez minutos de retraso y acabó pasadas las 12 de la noche ofreciendo un espectáculo de tres horas sin descanso. Comenzó con Lonesome Day y siguió con la demoledora My Love Will Not Let You Down. El sonido, al principio del show, no fue perfecto al igual que la voz de Bruce que daba la sensación que tenía que forzarla en los primeros temas. Afortunadamente, a medida que avanzaba el concierto tanto el sonido como la voz del artista fueron mejorando. Resaltaría los temas, Radio Nowhere, Seeds, The Power Of Prayer, My Hometown, The River y I'M On Fire que fue la primera vez que la escuché en directo y no me defraudó en absoluto. Este fue el décimo concierto de Bruce al que asistí y, sin duda, me gustó bastante más que el del año pasado, no por los temas, sino por la actitud y la voz de Bruce que me pareció mucho mejor, a pesar de que, cómo he dicho anteriormente, al principio no lo pareciera. Lo peor fue la vuelta a casa: el metro cerrado a las 12 de la noche, no había manera de encontrar un taxi vacío y la caminata hacía casa hasta vislumbrar alguno lejos de la zona del concierto.
El setlist del concierto fue el siguiente:
Lonesome Day, My Love Will Not Let You Down, Cover Me, Radio Nowhere, No Surrender, Ghosts, Seeds, Darkness On The Edge Of Town, The Power Of Prayer, The Promised Land, Hungry Heart, Waitin' On Sunny Day, Because The Night, I'M On Fire, She's The One, The Rising, Badlands, Thunder Road, Born In The USA, Born To Run, Bobby Jean, Dancing In The Dark, Tenth Avenue Freeze-Out, Twist & Shout, Rockin' All Over The World, I'll See You In My Dreams.
El Periódico Bruce Springsteen, un poder que no se extingue, en Estadi Olimpic
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